
Con una emotiva misa en la Iglesia de San Miguel de Azapa, la comunidad de Arica conmemoró la tradicional festividad de las Cruces de Mayo, una celebración profundamente arraigada en la identidad cultural de los valles de Azapa, Lluta y Acha.
Más de 200 personas participaron en la ceremonia, llevando en procesión sus cruces ornamentadas hasta el templo, en un acto de fe y tradición que ha sido transmitido de generación en generación. Esta festividad, que combina elementos religiosos y culturales, fue recientemente reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial, destacando su importancia en la preservación de las raíces afrodescendientes de la región.
Durante la misa, se resaltó el valor de esta tradición, que simboliza la bendición del hogar, la salud de las familias y la gratitud por los frutos de la tierra. La comunidad reafirmó su compromiso de mantener viva esta celebración, que no solo fortalece la identidad local, sino que también promueve la unidad y el respeto por la diversidad cultural.